EL DIRECTOR DE WILLIAMS, ENTUSIASMADO ANTE LA REESTRUCTURACIÓN DEL EQUIPO

James Vowles sabía que tendría mucho que hacer cuando se puso al frente de uno de los equipos más históricos de la Fórmula 1 a principios de la temporada pasada. Por eso, gran parte de su enfoque inicial se centró en colocar los cimientos para una reconstrucción.

Muchos de esos proyectos ya están en marcha (incluido el abandono del uso de Microsoft Excel para gestionar la construcción de los monoplazas) y, otras de sus tareas clave, era asegurar una sólida alineación de pilotos. Eso no sólo ayudaría a impulsar al equipo hacia adelante, sino que también serviría como motivación para el personal, ayudaría a atraer socios comerciales y haría que el equipo fuera atractivo para nuevos integrantes.

La prioridad primaria era cerrar un nuevo contrato con Alexander Albon. Pues el piloto tailandés había recibido interés de otros equipos, incluido un posible puesto en Red Bull en 2026, pero Vowles lo convenció de que se quedara.

“Alex tuvo una buena oportunidad, incluso en un auto ganador de carreras, y está aquí. Y eso te dice que está comprometido con el viaje que estamos emprendiendo, que entiende el viaje que estamos emprendiendo, y para Williams, eso fue una enorme muestra de confianza en lo que estamos haciendo y hacia dónde vamos”, dice Vowles cuando habla sobre Albon.

Tras ello, la atención se centró, entonces, en hacerse con los servicios de Carlos Sainz, que tenía una gran oportunidad en Alpine y Sauber/Audi. Así, fue una lucha encarnizada, que incluyó mensajes diarios entre ambos e innumerables reuniones en habitaciones de hotel de todo el mundo.

“Fue el primero en señalarnos que la competencia es increíble. Tenemos uno de los fabricantes de equipos originales más grandes del mundo [Audi], uno con el que su padre ganó. No es fácil rechazarlo. Tienes un equipo que ha ganado una carrera más recientemente que nosotros. No podemos ignorarlo. Pero lo que vio con nosotros no es dónde estamos hoy, sino hacia dónde vamos”, expresó Vowles sobre Sainz.

“Williams estaba antes en una posición en la que lo que quedaba, lo tomábamos o sacábamos un beneficio por ello. El mundo ha cambiado, así ya no se puede ser competitivo [en la F1]. Eso se entiende.

Como resultado de eso, lo que realmente me alegra es que hemos tenido conversaciones serias con pilotos de clase mundial que quieren estar aquí, no que tienen que estar aquí. Eso es un mundo completamente diferente. No se puede reconstruir [el equipo] sin eso. Se necesita esa fuerza para competir en el escenario mundial”, agrega Vowles sobre la contratación de pilotos.

Pero no son solo los pilotos los que se han sentido atraídos por Williams: desde que Vowles se unió al equipo, éste ha crecido en su mano de obra: de alrededor de 720 a unos 1.000. En junio, dieron a conocer una estructura técnica reforzada que incluía a 26 nuevos integrantes de equipos rivales en la Fórmula 1, incluido el ex director técnico de Alpine, Matt Harman.

“Casi todo dependerá de la gente y de la cultura. Nuestras instalaciones no están al nivel que deberían, pero trabajaremos en ello en segundo plano y, en última instancia, lo que ocurrirá es que la gente será la que impulse eso: ‘esto es lo que necesito para tener éxito y asumir la responsabilidad de todo eso al mismo tiempo’”, dijo Vowles también.

Tal vez sea difícil ver el progreso de Williams desde fuera, pero el estado de forma actual no le interesa mucho a Vowles, que tiene la vista puesta en el panorama general: “Cuando empecé, nos concentrábamos en el presente. Ahora estamos centrados en el 24, 25, 26. Y, por cierto, también hay un proyecto para el 27 que hemos puesto en marcha. Tenemos personas muy buenas que miran hacia el futuro; ya no se preocupan por el presente.

Por eso, cuando la gente me pregunta si estoy contento o no con el ’24’, no me importa. Odio decirlo, pero para mí no significa nada. Me encanta sumar puntos en Mónaco, pero estoy muy entusiasmado con lo que tenemos por delante en el ’25, ’26 y ’27, ya que es donde invertiremos nuestro tiempo y recursos. Tenemos que hacerlo.

Hay demasiado por cambiar y deshacer como para no estar en una situación en la que nos concentremos en eso hoy. Estoy entusiasmado por el futuro. ¿Estamos donde esperaba que estuviéramos en 2024? No.

Tenía la esperanza de que demostráramos al mundo que no estamos dando pasos atrás y que estamos dando algunos pasos adelante, pero estoy conforme con ello porque puedo ver que la base de lo que hemos hecho es suficientemente buena”.

Mientras tanto, Vowles considera que en 2026, cuando se introducirán nuevas reglas en materia aerodinámica y de unidades de potencia, será un momento para reiniciarse: “Voy a sonar muy aburrido, pero todo se reduce a los datos. Cuando me incorporé, no sabíamos cuánto tiempo llevaría diseñar o construir un alerón delantero. No sabíamos dónde estaba en un sistema. Eso funcionará para un alerón delantero, pero no funcionará cuando intentes crear 20.000 bits de una sola vez.

¿Dónde tenemos que estar para 2026? Debemos tener datos que envuelvan todo. Eso significa que ya no se superará la capacidad. Puede significar que no podemos ser tan grandes y audaces como queremos, pero construiremos el auto con las especificaciones, el estándar, la calidad y el costo correctos.

Comenzaremos por ahí y luego desarrollaremos recursos en torno a eso, incluidas las instalaciones, para sumar rendimiento. Sé que podemos llegar a eso en 2026. Más allá de eso, las instalaciones, los nuevos simuladores… todas esas cosas se pondrán en funcionamiento. Se están ordenando en segundo plano.

Estamos gastando dinero en segundo plano y aparecerán en los próximos dos o tres años. Luego tendremos que utilizarlos correctamente. No se puede correr antes de poder caminar y nosotros todavía no estamos caminando”.

A su vez, los propietarios de Dorilton creen en la visión de Vowles, lo que significa que están proporcionando los recursos para los proyectos pequeños, medianos y grandes y al mismo tiempo siendo pacientes, un rasgo que no siempre ha prevalecido en la Fórmula 1 a lo largo de los años. Pero no se trata solo de gastar su propio dinero. El equipo está haciendo un gran esfuerzo para aumentar su cartera de patrocinadores en un mercado cada vez más competitivo. Sober eso, la pregunta es: ¿están más cerca de conseguir un patrocinador principal?

“La respuesta corta es sí”, dijo Vowles. “En Mónaco y Miami, tuvimos cerca de cuatro o cinco conversaciones serias con patrocinadores principales. No se trata de prospectos potenciales, sino de un paso o dos más allá, donde realmente se está entrando en detalles más profundos. No se trata de uno, sino de varios: cuatro o cinco. Espero que para principios del año que viene, todo esté [resuelto]”, agregó el director.

Por último, como reflexión final, Vowles dijo: “Me levanto todos los días increíblemente feliz de ser parte de este proyecto. Hay días diferentes, a veces me despierto y pienso ‘¡hay tanto por hacer!’ Pero lo que disfruto es que estamos generando diferencias tangibles y reales, y puedes ver el impacto casi en cuestión de horas después de haber tomado la decisión.

Esa es la parte divertida, sin duda. Es mucho trabajo en un corto período de tiempo para lograr que esto sea un éxito. Pero hay algunas razones reales por las que la gente debería estar feliz aquí”.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Fuente y fotos: formula1.com