Las esperanzas de Sergio Pérez de lograr un tercer podio consecutivo en su carrera de local se desvanecieron en la primera curva de la primera vuelta, cuando el mexicano chocó con Charles Leclerc y quedó fuera de carrera.
No ha sido una temporada fácil para Pérez, quien ha tenido una serie de malas actuaciones en clasificación, lo que le ha puesto las cosas difíciles el día de carrera. Pero con los fanáticos mexicanos saliendo de las tribunas temprano el domingo después de que su héroe local terminó rápidamente la prueba, el jefe del equipo Red Bull, Christian Horner, se apresuró a defender su posición.
“Por un lado, estoy eufórico por haber ganado la carrera y por mantener ese impulso ganador. Pero por otro lado, desesperadamente decepcionado por Checo, que iba por el liderato de la carrera, un accidente en la curva 1. Salir en la primera vuelta frente a su público local, fue realmente doloroso para él.
Estaba muy emocionado, como puedes imaginar, pero es un piloto de carreras, tenía que intentarlo. No se puede culpar a ninguno de los pilotos, tres contra uno siempre será difícil en una curva. Y tuvo un comienzo espectacular, probablemente su mejor comienzo del año. Y lo intentó frente a su público local“.
Mientras regresaba con el auto dañado a boxes y el equipo comenzaba a evaluar los daños, rápidamente se hizo evidente que no regresaría a la pista, por lo cual se lo vio a “Checo” golpeando el volante con sus manos en evidente frustración.
“Por supuesto, es difícil para él, pero él es nuestro piloto y queremos que logre lo que sabemos que es capaz de hacer, y continuaremos apoyándolo y protegiéndolo“, dijo Horner, cuando se le preguntó sobre los rumores que están dando vueltas en el paddock sobre el futuro del mexicano en el equipo.
“Tiene 13 años de experiencia en la Fórmula 1, y cuando estás pasando por un momento difícil es importante apoyarlo. Hasta ese momento estuvo teniendo un gran fin de semana“, agregó el directivo de Red Bull.
Fuente y fotos: formula1.com