La marca japonesa proveedora de motores de la IndyCar frenó el acuerdo entre Fernando Alonso y el equipo Andretti Autosport, cuando su filial estadounidense le pidió la aprobación final.
Cuando todo parecía que el piloto español iba a participar de las 500 Millas de Indianápolis 2020 con la escuadra de Michael Andretti, apareció un obstáculo: Honda. Es que el fabricante nipon se niega a que use sus impulsores en la competencia que se disputará el próximo domingo 24 de mayo.
Esta información fue asegurada por la revista estadounidense RACER, medio automovilístico especializado en la IndyCar. Con el acuerdo entre el piloto y el equipo ya cerrado, Honda Performance Development EEUU se contactó con la sede mundial de la marca en Tokio antes de realizar el anuncio oficial, que se esperaba se hiciera la semana pasada, pero recibió como respuesta la negativa a proceder con tal acuerdo.
La relación entre ambas parte está rota desde el trunco proyecto que ambos compartieron en McLaren entre las temporadas 2015 y 2017 de Fórmula 1.
Además, y según la propia RACER también, aunque respaldada por otros medios en estas semanas, el convenio con el asturiano incluía también la posibilidad de disputar algunas carreras en circuito posteriores a la Indy 500, algo que podría haber facilitado un salto a tiempo completo en 2021, cuestión que ahora queda en el aire.
Por lo tanto, todo indica que Alonso tendrá que buscarse, a contrarreloj, un equipo motorizado por Chevrolet para correr esta mítica prueba.
Fuente: Campeones/motor.es