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La escudería Toro Rosso contará nuevamente con la última versión del motor Honda de Fórmula 1 para el Gran Premio de Brasil, ya que la altura de Interlagos no es tan extrema como la de la Ciudad de México, lugar donde Pierre Gasly y Brendon Hartley utilizaron una especificación anterior de la unidad motriz.
La menor densidad en el aire, experimentada a mayor altitud, impacta en el proceso de combustión y el turbocompresor trabaja con más fuerza para compensar, por lo que el proveedor japonés eligió utilizar un motor anterior que conocía mejor para ponerlo a punto para esas condiciones poco comunes.
En ese sentido, el propio equipo Red Bull evitó usar la más reciente especificación del motor Renault en México por razones de confiabilidad, aunque tampoco se espera que la utilice en Brasil ya que el circuito de Interlagos ubicado en San Pablo es el segundo más alto del calendario, a unos 800 metros sobre el nivel del mar.
Sin embargo, y pese a esto, Honda sí hará regresar su especificación 3 de motor.
Con todo esto, Hartley cree que Toro Rosso puede apuntar a sumar puntos en Brasil, luego de que su compañero Gasly sea décimo en tierras aztecas usando una unidad de potencia más antigua y comenzando desde el fondo de la parrilla tras una penalización.
No obstante, el piloto francés utilizó un motor nuevo de especificación tres en la primera práctica de México para sumarla a sus unidades de potencia disponibles, luego de que Honda identificara un problema de ensamblaje que podría haber afectado al motor que utilizó en el Gran Premio de los Estados Unidos.
Fuente: lat.motorsport.com
