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José Manuel Sapag finalizó este viernes el primer día de trabajo en Monza, donde este fin de semana disputa una fecha del Campeonato Europeo de TCR sobre un Seat León del equipo Baporo Motorsport.
Monza es único por su historia, su mística y su atmósfera. Pero también lo es por su velocidad, por sus exigentes frenadas y la imperiosa necesidad de llevar el auto rodando lo más suelto posible, ejercicio que requiere mucha concentración. Trabar el auto, salir patinando de una chicana, o excederse en un frenaje, es sinónimo de mucho tiempo acumulado al final de cada recta.
En esta pista cercana a Milán, el piloto argentino José Manuel Sapag, vuelve a subirse a un Seat León Cupra del equipo español Baporo Motorsport, con el cual tuvo su debut triunfal en el Certamen Español de Velocidad este verano. Esta vez, la exigencia y el desafío son mayores, ya que tomará parte de la 6ta fecha del competitivo Campeonato Europeo de TCR.
Este viernes fue su primer día de actividad, que constaba de dos tandas de entrenamientos.
En la primera sesión, el piloto de Tigre se dedicó a asentar frenos y conocer la pista con el auto, tomando referencias para la segunda sesión. En la segunda salida a pista, giró inicialmente con las cuatro gomas de poco uso de la primera tanda, y faltando 5 minutos para el final de la tanda, colocó dos gomas 0 km en el tren delantero para salir a buscar tiempos más rápidos. En la primera vuelta logró el tiempo de 1:59.887, cerrando el sector 2 justo antes que salga una bandera amarilla que dejó neutralizada la zona hasta el final de la sesión. En su segunda vuelta, al no poder pasar con velocidad libre, sólo hizo los sectores 1 y 3 a fondo, mejorando 4/10, pero la vuelta total no se pudo computar por el tramo neutralizado.
El resultado es sumamente alentador, ya que en este primer día, Manu no giró en succión con otros autos en ningún momento, algo que en Monza, es tan importante por sus tres extensas rectas. Esa es la misión para el sábado de clasificación.
DECLARACIÓN DE MANU SAPAG: “Estoy muy contento, nos fue muy bien en este primer día en Monza, una pista increíble. Correr acá es una sensación indescriptible. Quedamos P8 a 1 segundo, todavía tengo un poco para mejorar, y además no fui en succión con ningún otro piloto, que mañana sí lo vamos a hacer. Estuvimos ya hablando para ponernos de acuerdo con quién vamos a girar juntos en clasificación. Me sorprendió mucho lo difícil que es frenar aquí. Ya sabía que Monza es crítico para ese tema, pero cuando tenés que hacerlo, te das cuenta que es más difícil de lo que crees. En las rectas se enfrían y quedan en 120°, pero en las frenadas suben a 800°, así que será un tema crítico para las dos carreras, mañana y el domingo. En Ascari se frena muy adentro, con dirección, y en la curva 1, llegás a 240 km/h y tenés que frenar a unos 150 metros porque no lo parás. Vamos muy rápido, es hermosa la sensación.”
Fuente: Prensa Manu Saspag
