Esta mañana se ha presentado en el Instituto del Mundo Árabe en París, el recorrido de una 42ª edición del Dakar cuyo punto de salida tendrá lugar en Jeddah el 5 de enero de 2020, para después dar paso a 12 etapas con meta final en Qiddiyah, cerca de Riad, la capital del país.
Con una distancia total cercana a los 7900 km, los pilotos se someterán a una dura prueba en los 5000 km de especiales de la competición: además de descubrir las dunas de Arabia Saudí, que harán acto de presencia en la segunda parte del recorrido, la visita al país árabe sumergirá a los participantes en un primer momento en laberintos de pistas donde las dotes para la navegación resultarán primordiales.
El cambio de continente viene acompañado de modificaciones reglamentarias que pretenden volver a los principios fundadores del rally raid, disciplina que permite que los aficionados se codeen y, en ocasiones, pugnen directamente con los profesionales. Los nuevos roadbooks y las etapas maratón contribuirán a reducir las diferencias.
La cita inicial será en Jeddah, la aldea de pescadores fundada en el siglo VII que acabó convirtiéndose en uno de los puertos comerciales más importantes del mundo y en puerta de entrada para los peregrinos que se dirigían a los lugares santos de La Meca o Medina.
El próximo 5 de enero, la segunda ciudad del país será el punto de partida del Dakar y marcará sobre todo el comienzo inmediato de las dificultades del rally. Pilotos y tripulaciones afrontarán en el primer tercio de la carrera las sutilezas de la navegación al estilo saudí, con decisiones de orientación que se complicarán por el gran número de pistas existentes. Los copilotos llevarán la voz cantante en las inmediaciones del mar Rojo o en los confines de Jordania para las etapas en torno a Neom, y después en dirección a Al Ula. El recorrido, cada vez con más arena, planteará escollos de envergadura en las dunas entre Ha’il y la capital Riad, donde habrá una jornada de descanso. Las hostilidades se reanudarán e intensificarán al adentrarse de lleno en el Lugar Vacío, la inmensa nada desértica del territorio saudí en la que se disputarán las etapas clave de Shubaytah y Haradh. No osbtante, nada impide que la clasificación siga sin decidirse cuando llegue la etapa final de Qiddiyah, donde la navegación podría jugar una mala pasada incluso a los mejores pilotos.
En estas regiones inexploradas del planeta rally raid, la novedad de la 42ª edición será también la voluntad expresa de reequilibrar las fuerzas en favor de las estructuras menos profesionalizadas. La realización de los nuevos roadbooks, redactados en colores y entregados en varias etapas apenas unos minutos antes de la salida de la especial, priva a los pilotos mejor rodeados de una ayuda decisiva. Del mismo modo, la introducción de una etapa «supermaratón» para motos y quads en la que solo se permitirán 10 minutos de trabajo mecánico volverá a situar el mantenimiento de los vehículos en el corazón mismo de la prueba, al igual que la etapa maratón propiamente dicha (impuesta a todos los vehículos) en la penúltima jornada de carrera. Además, para que los menos experimentados puedan proseguir con su aprendizaje, se ha acordado conceder un comodín, a partir de ahora en todas las categorías, a los pilotos obligados a abandonar: podrán retomar la carrera registrándose en una clasificación paralela bautizada como «Dakar Experience».
Aventureros de los desiertos del planeta
El Dakar atrae a quienes viajan en busca de extremos. Muchos de ellos acaban convirtiéndose en aficionados fieles a la prueba. Algunos la frecuentaban en el siglo XX, pero otros la descubrieron en torno a los años 2000, siguieron a la competición hasta Sudamérica y ahora vuelven a presentarse a la cita en este tercer capítulo. En la lista de participantes, 65 pilotos y copilotos pueden reivindicar esta vuelta al mundo algo particular que los ha llevado a posar sus ruedas en cuatro continentes. Entre ellos, tres han cumplido la hazaña de imponerse en África y después en Sudamérica: Stéphane Peterhansel y Joan «Nani» Roma, con la particularidad añadida de haber ganado tanto en motos como en autos; mientras que el checo Josef Macháček dominaba la categoría aún embrionaria de los quads en África antes de inaugurar el palmarés oficial en Buenos Aires en 2009. Sin embargo, el vencedor más veterano presente en Arabia Saudí será el italiano Giulio Minelli, que acompañó en 1986 a Giacomo Vismara, piloto del primer camión en la meta final del Dakar. En la pugna por ser el proveedor de muchos pilotos y tripulaciones desde hace más de 20 años, BF Goodrich también es el único socio oficial que ha acompañado al Dakar desde 2007.
Este es el recorrido completo:
Fuente: dakar.com