Una fuerte tormenta obligó a detener la carrera de la NASCAR en Bristol, cuando quedaban 46 vueltas para que culmine el segundo segmento, por lo que el resto del recorrido se completará mañana.
Cuando restaban 46 vueltas para que finalizara el segundo stint de la mítica competencia de la categoría más popular de los Estados Unidos los organizadores decidieron interrumpir la carrera, pero desde la misma organización se esperaba volver a empezar, sin embargo se vieron obligados a suspenderla parcialmente, luego de que el pronóstico del tiempo marcará 90% de posibilidad de lluvia sobre el óvalo de media milla.
En el momento de la interrupción, Kyle Larson, a bordo del Chevrolet N° 42 del Chip Ganassi Racing, estaba a la cabeza. Brad Keselowski, por su parte, ganó el primer segmento de 125 giros.
Fuente: Campeones