El equipo británico se convierte en principal propietario del equipo de Sam Schmidt, con el que se asoció desde la temporada pasada.
Camino a terminar su segunda temporada como participante en la IndyCar, McLaren ha dado un paso definitivo para consolidar su presencia en la categoría. La formación británica, que había competido en las 500 millas de Indianápolis de 2017 y 2019 en diferentes situaciones, se asoció con Schmidt Peterson Motorsports para competir desde la temporada 2020 como McLaren SP, reteniendo el patrocinio principal de la compañía tecnológica Arrow.
Ahora, a través de una rueda de prensa a menos de 24 horas de la carrera en Nashville, se ha confirmado que McLaren Racing ha iniciado el proceso para la adquisición del 75% de McLaren SP, convirtiéndose en efecto en el accionista mayoritario y principal propietario del equipo.
Sin embargo, la identidad del equipo no cambia con esta operación, y seguirá siendo conocido como McLaren SP. Se establecerá una “junta directiva” de cinco personas, liderada por Zak Brown. Dos de los miembros del consejo serán el fundador del equipo, Sam Schmidt, y el empresario canadiense Ric Peterson, quienes hasta ahora eran los únicos propietarios (Peterson figura como socio desde 2013). Ambos retienen el 25% restante de la compañía, y estarán acompañados en ese consejo por otras tres personas designadas por McLaren.
El actual director de operaciones Taylor Kiel continuará en su función en 2022, informando directamente al consejo de las actividades del equipo en pista, y la formación seguirá afincada en Indianápolis.
Por otro lado, en la rueda de prensa posterior, Zak Brown (director de McLaren Racing) ha confirmado que tanto Patricio O’Ward como Felix Rosenqvist continuarán siendo los dos pilotos principales de la formación en 2022. También ha aseverado que la intención del equipo es expandirse a un tercer coche a tiempo completo para 2023, pero que esa situación podría adelantarse a 2022 si se encuentra la financiación correspondiente.
Fuente: motor.es