Daniel Ricciardo se está preparando para ponerse al volante de un NASCAR en el “Circuito de las Américas” este fin de semana, ya que el CEO de McLaren, Zak Brown, cumplirá una apuesta que hizo con el australiano.
El directivo de la formación británica le ofreció a su nuevo piloto para 2021, Ricciardo, una prueba en el Chevrolet Monte Carlo 1984 de Dale Earnhardt Sr, con la condición de que el ex piloto de Renault anotara un podio para McLaren esta temporada.
Ricciardo fue mejor que eso, y lideró un 1-2 de la formación en Monza por delante de su compañero de equipo Lando Norris. Por ello, este fin de semana, recibe su recompensa y, además, le dará a los espectadores con una demostración del característico auto azul y amarillo, antes del Gran Premio de Estados Unidos.
En cuanto al piloto de McLaren, dijo después de la carrera en el circuito italiano que será un momento especial cuando finalmente se ponga al volante: “Sí, hay un par de cosas hoy, como Dale Earnhardt, mi gran héroe, y tener un La oportunidad de ponerse al volante de uno de sus coches es una locura. Sin duda será un momento de ‘pellizcarme’“.
Pero, el experimentado piloto de la isla oceánica, dijo que tal vez merecía algo más que un paseo en ese vehículo de NASCAR después de entregarle a McLaren su primera victoria en la Fórmula 1 desde 2012: “Estoy como, ¿tal vez él me da el auto? Creo que siempre fue un podio, yo puedo conducirlo. Nunca hablamos de una victoria, así que le di mi zapato con el que bebió, así que tal vez él me de el coche. Es un buen intercambio“, bromeó Ricciardo.
Fuente y fotos: formula1.com