La categoría estadounidense de monoplazas se une a Red Bull Advanced Technologies, en el desarrollo del dispositivo de protección de los pilotos que entrará en la categoría en 2020.
El Aeroscreen de Red Bull es la segunda fase de la mejora de la seguridad de los pilotos de IndyCar después del dispositivo de Protección Frontal Avanzada (AFP) que se vio en el paso de la categoría por el circuito mixto de Indianápolis.
Este nuevo elemento de seguridad, de tres pulgadas de alto, tiene como objetivo ayudar a desviar las piezas y escombros que puedan llegar al cockpit y a la cabeza del piloto, se extiende desde la mitad del chasis hasta la parte más alta del morro. El marco superior en forma de herradura está diseñado para no quitar línea de visión a los pilotos, incluso cuando miran a su alrededor girando en un óvalo con peralte.
Se espera que soporte una carga de 150 kilonewtons (kN), tanto como puede recibir el Halo de la Fórmula 1. Un kilonewton es una fuerza nominal de gravedad, no de peso estático o masa. (Fuerza = masa x aceleración.)
El diseño de Red Bull Advanced Technologies consistirá en una pantalla laminada de policarbonato que incluye un revestimiento antirreflectante en el interior de la pantalla, un dispositivo anti-niebla gracias a un elemento de calentamiento integral y posiblemente con láminas protectoras, y será producido por empresas de terceros.
Otra característica para los pilotos será una opción de refrigeración de la cabina diseñada por Dallara junto con la propia marca austriaca. En las imágenes que lo representan, la refrigeración sería provista por ventilaciones ubicadas en el panel justo antes del Aeroscreen, pero el diseño aún no se ha finalizado.
Tras completar el diseño del Aeroscreen, la IndyCar espera que determinados pilotos hagan las pruebas en pista este verano y que, aprobado el dispositivo, se entregue a todos los equipos antes del otoño.
Fuente: lat.motorsport.com