La primera visita del WRC A Chile (del 9 al 12 de mayo) representa una hoja de papel en blanco para todos, desde los navegantes que llenan ese mismo papel con sus notas totalmente nuevas hasta los pilotos, que se enfrentan a caminos que nunca fueron transitados.
La sexta prueba de la temporada del Campeonato Mundial de Rally se realiza con epicentro en la ciudad portuaria de Concepción, a casi 500 km al sur de la capital, Santiago. La mayor parte de la ruta se encuentra entre el Océano Pacífico y el Río Biobío, la segunda vía fluvial más grande del país.
Los caminos de tierra se adentran profundamente en los bosques del interior por caminos medianamente rápidos utilizados por los camiones madereros, pero también hay más pruebas abiertas con impresionantes vistas del Pacífico.
No obstante, todo comienza con una colorida ceremonia de apertura el jueves por la noche en el centro de Concepción.
El día de apertura del viernes es el más largo, con 125,27 km, y viaja hacia el sur para realizar dos arduas especiales forestales, divididas por una asistencia en Talcahuano. El Pinar (17.11 km) se celebra una vez con El Puma (30.72 km) y Espigado (22.26 km) abordado dos veces.
Termina con el emocionante tramo de noche en la calle Bicentenario, en el centro de Concepción. La especial de 2,20 km pasa por el teatro de la ciudad y el monumento conmemorativo del terremoto y el tsunami que azotaron la región en 2010.
El Puma es la especial más larga del rally y se describe como la ‘Ouninpohja de Chile’, en referencia al tramo clásico de Finlandia. Las pistas técnicamente complicadas pero rápidas y viradas serán un reto difícil.
Una segunda etapa compacta más cerca de la ciudad suma 121 km de tramos en menos de 400 km. Río Lia (20,90 km), María Las Cruces (23,09 km) y Pelún (16,59 km) se recorren mañana y tarde con asistencia intermedia.
La final de las cuatro especiales del domingo abarca casi 59 kilómetros y cuenta con más pistas abiertas. La prueba Bio Bio de 12,52 km, que comienza en el río y termina en la costa, abre la acción y la cierra con el Power Stage. Sándwiches Lircay (18,06 km) y San Nicolás (15,28 km).
Los 5 principales desafíos:
• Sin experiencia previa para los competidores o equipos de apoyo.
• Los pilotos y copilotos deben preparar nuevas notas.
• No hubo oportunidad de perfeccionar la puesta a punto del coche antes del rallye, ya que no se permitió la realización de test en Chile.
• Falta de conocimientos sobre el rendimiento y el desgaste de los neumáticos.
• La elección del momento en que se deben tomar las medidas necesarias. Hay muchas oportunidades para salvar décimas vitales, pero los recovecos de la carretera esconden troncos de árboles y piedras, por lo que las notas no deben ser demasiado optimistas.
Fuente y fotos: wrc.com