Las principales marcas que integran el Campeonato Mundial de Resistencia mantienen reuniones para diagramar el futuro de la categoría, que estaría más cercano a reemplazar los híbridos de LMP1 por autos deportivos de lujo.
El WEC inició hace unos días una temporada que dejó por un lado alivio respecto de la cantidad de autos, y por otro la preocupación de la disparidad en su divisional mayor, la LMP1, donde los Toyota mostraron que por el momento competirán solo entre sus pilotos por el lugar más alto del podio y por el título.
Sabiendo esto y pensando más allá del actual torneo, representantes de Toyota, McLaren, Ford, Aston Martin y hasta Ferrari se sentaron todos en una mesa para debatir acerca de cómo seguirá la categoría.
El tema principal pasa por la opción de cambiar el reglamento de LMP1 hacia una filosofía más dirigida a los GTP, algo que en teoría debería atraer a los principales fabricantes que en los últimos tiempos se han lanzado al desarrollo y construcción de hiperdeportivos para la calle más propios de circuito.
Con tres fabricantes representantes de la especialidad GTE Pro del mundial, tomando parte de estas conversaciones parece claro que estas se están desarrollando en el mismo camino que el que se comenzó a vislumbrar hace ya algunos meses, con más marcas involucradas gracias a la reducción de costos, una limitación de la tecnología híbrida y la llegada de autos que se alejan de la figura de los prototipos LMP1 actuales para acercarse a formas que tengan relación directa con los hiperdeportivos que podemos ver, si bien con poca frecuencia, en las calles.
Fuente: Carburando